Si sabéis de alguien que tenga baja la autoestima, mandadle para Guinea Ecuatorial, y decidle que se quede parado en medio de la avenida Hassan II, justo donde está el seminario en que estoy viviendo. En breves instantes se sentirá la persona más importante del mundo. No pasarán más de diez segundos sin que algún coche llame su atención mediante el claxon. Igual le extraña que la inmensa mayoría de los coches que lo hacen sean blancos, a excepción de los capós y el techo, que son de color rojo. De hecho, se sorprenderá al ver que si responde saludando al coche que le pita al acercarse, parará delante suyo. Y es que en Guinea, lo de los taxis funciona así.
Mucho más de la mitad de los coches que circulan por Malabo son taxis. Se puede distinguir por el color de los mismos, aunque también hay algunos piratillas que no pagan, y lo hacen de extranjis con los coches (o para sacarse un sobresueldo después de trabajar, y así intentar llegar a final de mes). Y pitan, pitan mucho, continuamente. Si vas caminando por la calle te pitan para ver si te llevan, si te quedas parado al borde de la carretera ya no te quiero ni contar. Seguro que muchos estáis pensando que por qué hay tantos sin van siempre vacíos y buscando gente a quien llevar. Je. Eso no es así aquí. El que vaya alguien en el taxi no significa que no pueda montar a nadie más. De hecho, cuando uno para un taxi, le dice donde va, y si le viene bien para dejar al ( o a los) que ya está llevando, pues te dice que sí, y te montas. Bueno, o da otro pitido en señal de aprobación.
Y así el taxi se va llenando y vaciando a medida que avanza por las calles. Ya me ha tocado un par de veces montarme en uno que ya tenía tres pasajeros, por lo que nos ha tocado ir como sardinas en lata.
Pero, ¿cómo se sabe cuánto tiene que pagar cada uno, hay varios taxímetros? Jeje. Aquí eso del taxímetro no se lleva. Es tarifa plana. 500 FCFAs por trayecto. Vayas donde vayas. Bueno, hay alguna excepción. Si vas a la zona de Malabo 2, te pueden cobrar 1000 (no entiendo por qué, si hay zonas más lejanas que están dentro de la “tarifa”), y creo (no lo tengo constatado) que si se montan tres personas, también se paga 1000, si son dos 500. Está claro por qué, ¿no? Si se montan tres sólo pueden coger a uno más por el camino.
Aunque no fuesen así de identificados, se podría distinguir a un taxi a distancia: si el coche está demacrado, le falta uno o los dos retrovisores, tiene una pedrada en la luna delantera que ocupa casi todo el cristal, o desprende una densa nube de humo negrísimo, tienes anti ti un taxi. De hecho, estoy convencido de que si uno se compra un coche nuevo, y lo quiere usar como taxi, primero le pegará unos cuantos martillazos por todas partes, y luego le romperá algún piloto, o dejará alguna parte colgando. De las tapicerías y su limpieza mejor no hablamos, ¿no?
Y por dentro, pues toda una caja de sorpresas. Desde lo mínimo y necesario para que el coche ande, entre lo que no está incluida la palanca de los intermitentes, hasta potentes equipos de música. Lo más bestia que me he encontrado, era uno que tenía dvd, y la pantalla estaba en el parasol del copiloto. Seguro que cuando su inventor lo puso ahí, pensando en que fuese más seguro, no se imaginaba al conductor con medio cuerpo girado para poder verlo desde su asiento a la que esquivaba coches por la calle. Y lo que no suele faltar son banderines del madrid o del barça. Y lo más increíble que he visto, un coche al que le faltaba la manilla para abrir la puerta desde dentro, y el conductor tenía que echar el brazo atrás porque sólo él donde estaba el alambre del que había que tirar para abrirla. Ahora acabo de llegar a casa, y venía en un taxi bastante decente, detrás de otro que en lugar de luna trasera llevaba un plástico encintado, lo justo para evitar que entrara el agua. Y es que aquí las cosas tienen otra importancia. Si de camino a tu destino el taxi pasa por una gasolinera, y anda justo de combustible, se para a repostar. Y si hay una fila de diez coches por surtidor, se espera. Aquí nadie se extraña si llegas tarde.
¡Hola Jorge! Cada día que te leo me emociono y me sorprendo a partes iguales, tanto por todo lo que nos cuentas como por cómo lo haces (consigues que parezca que estamos allí! XD). Debe ser una experiencia única y maravillosa, así que sigue disfrutándola como hasta ahora y contándonos tu día a día para poderlo vivir contigo (y morirnos de envidia también!) Besitos!
ResponderEliminarTu prima Verónica
Hola Wapo!!! Sigo enganchadisima a la lectura de tus "aventuras" y es que, a parte de ver que estas bien, me hacen reflexionar y pensar en muchisimas cosas y en darme cuenta de otras tantas. Nose, es como si estuviesemos alli.
ResponderEliminarY dejame decirte, (mejor dicho, me voy a atrever a escribir) que este viaje no solo te esta sirviendo a ti como experiencia y aprendizaje, sino,que mucha gente que te aprecia esta viviendolo y aprendiendo contigo.
Un besazo ENORME!!!!
Muchas gracias a las dos! La verdad es que hay días que es un poco coñazo ponerse a escribir, ahora que ha empezado el curso hay días que llego más cansado (el calor de aquí ayuda a ello), pero creo que es una buena manera no sólo de ayudarme a poner en claro lo que veo aquí, sino sobre todo de poder hacéroslo llegar a vosotros. Me alegra y me sorprende que haya tanta gente leyendo esto a diario, y creo que es bueno para darse cuenta de las muchas cosas que cada día pasan inadvertidas para nosotros allá.
ResponderEliminarBueno, que gracias a las dos! Así da gusto empezar el día!
Besos pa tós